Probablemente sea una de las minas miticas del centro de España. Un recorrido subterraneo muy recomendable desde el punto de vista de la "espeleologia minera", pero debemos de tener especial precaucion con varios temas.
Uno es el de los murcielagos, no debemos de molestarlos cuando estan hibernando. Otros el de la estabilidad geotecnica, la bocamina esta en unos conglomerados muy inestables y no es hasta que cruzamos el pozo de ventilacion, que accedemos a la "roca sana". aun asi extremar las precauciones por los filones vaciados, donde se abrean grandes huecos y a la caida de algunas cuñas de techo, especialmente en los cruces de filones con la galeria principal.
Para saber mas consultar el articulo de la revista Bocamina nº11
( la puedes adquirir en el marcadilo de la Escuela de Minas de Madrid, os primeros domingos de cada mes en el stand del Grupo MIneraloguista de Madrid, en la entrada)
Croquis de las labores subterraneas del socavon Dos de Mayo de las minas de oro de Buenasbodas - Ricomalillo (Fuente: Jordá, 2001)
Sección idealizada de la Sierra de Jaeña y las minas de oro (Jorda, 2001)
Bocamina del socavon Dos de Mayo, desde el interior. Notese la ausencia de fortificacion y el notable riesgo de desprendimientos (Foto Jorda, en 2001)
A continuacion reproducimos algunos fragmentos del articulo de Bocamina, firmado por Orea, Gonzalez y Jordá:
La riqueza aurífera de la Sierra de Jaeña, entre Nava de Ricomalillo y Buenasbodas es conocida desde tiempos de los romanos. Después existirán dos épocas de actividad minera intensa: la primera entre finales del siglo XVII y primer tercio del XVIII; y la segunda entre 1853 y 1867. La mayor parte de los vestigios minero - metalúrgicos que se ven actualmente son de este último periodo; el resto son saneamientos sobre labores anteriores, o trabajos antiguos aterrados.
Es una mina de indudable valor patrimonial. Por una parte tiene restos atribuidos a los romanos (siglos I a IV d.C) y vestigios mineros documentados entre finales del siglo XVII hasta el XX. Y por otra, el legado inmaterial por su valor histórico como la mina de oro más importante del Centro de la Península.
Es también un interesante modelo geológico en la formación de la mineralización: se puede identificar el alcance de los procesos de enriquecimiento supergénico de la mineralización aurífera, y es de los pocos yacimientos filonianos de la Península Ibérica donde es aún posible encontrar muestras de oro nativo con relativa facilidad. Son filones mesotermales que se enmarcan en un cinturón “Hercínico” de mineralizaciones Ag-Au, que se extiende desde la provincia de Guadalajara (minas de plata de Hiendelaencina y oro de nava de Jadraque) hasta la provincia de Cáceres. Incluye las minas de plata de Ocejón, Pradeña del Rincón, Horcajuelo y La Acebeda en la provincia de Madrid, desaparece en la parte media del Sistema Central en Guadarrama y reaparece en los Montes de Toledo (oro en Ricomalillo y plata en Sevilleja de la Jara).
Los yacimientos auríferos del presente estudio se localizan entre los municipios de Nava de Ricomalilo y Buenasbodas, a 50 km al Sur de la localidad de Talavera de la Reina. Son diversas minas ubicadas en la falda meridional de una serranía en la zona occidental de los Montes de Toledo. Forman parte del dominio Hercínico, en la parte centro-oriental de la Península Ibérica.
La zona aurífera principal y por tanto las minas de mayor desarrollo se encuentra al norte del pueblo de Buenasbodas. Son unas labores abandonadas denominadas La Oriental o Pilar, y que tuvieron cierta importancia en la segunda mitad del siglo XIX. Se conservan las ruinas de un pueblo minero, los restos de su planta de tratamiento por amalgamación, los hornos de calcinación y dos grandes galerías con sus escombreras. Al conjunto minero - metalúrgico se le denomina también “Minas de la Fraternidad“, por el nombre de la principal sociedad explotadora. La bocamina superior se encuentra practicable, y es el único lugar donde puede estudiarse la mineralización "in situ". Existen aproximadamente dos kilómetros de galerias entre la principal y transversales. Los romanos vaciarían los filones desde su afloramiento en la parte superior del emboquille hacia el interior, mediante pozos de arrastre, deteniendo el laboreo en la zona de la actual galería superior.
Existen otros restos mineros de menor entidad: en la continuación de la Sierra de Jaeña, en el lado opuesto del Collado de La Barrosa hay otra mina de oro, de menor desarrollo denominada Capitán, también hay un pequeño pozo en las proximidades de las ruinas e la Fraternidad denominado “Pilar II”.
Continuacion del socavon, desde la zona donde ya aparece zocalo rocoso (Jordá)
Paso de la base de la chimenea de ventilación en el socavón Dos de Mayo (2001)
Contexto Geológico - metalogenético
La estructura general está gobernada por el anticlinal de Valdelacasa-Sevilleja, de 80 km de longitud y una dirección aproximada NO-SE. Los terrenos más jovenes en el área son bancos de pizarras y cuarcitas del Ordoviciano superior y el Siluriano y forman las partes más altas de los montes. Al S en el puerto de San Vicente son los niveles fosiliferos de Pizarras negras con Calymene. Al N y E constituidos por una alterancia de las pizarras , grauvacas y cuarcitas armoricanas en las Sierras de Jaeña y de Buenasbodas (donde se ubican las minas de oro).
La base del ordoviciano es una gran discordancia erosiva: sobre terrenos Precambricos en la parte Oriental, mientras que en la parte más occidental descansa sobre el Cambriano. Los materiales más antiguos (Precámbricos) y una intrusión granitica de edad tardihercínica con su respectiva aureola de metamorfismo de contacto ocupa la parte central de ola estructura.
Junto a Buenasbodas la transición Precámbrico - Cámbrico es de tipo concordante; pudiéndose estudiar unas decenas de metros pasado el arroyo de Ollegoso . El Cambriano es una alternancia de niveles de calcarenitas y niveles de margas con presencia de fantasmas de cristales de pirita. La direción es de N-166 y buzantes 50-55º E.
Las casas de la Sociedad la Fraternidad están sobre pizarras del Cámbrico (verificar). AScendiendo las laderas de la Sierra de Jaeña se entra en terrenos Ordovicianos a través de una discordancia erosiva enmascarada por los coluviones. Sin embargo, es posible observar dispersos fragmentos rocosos de conglomerados rojizos que corresponden a la facies conglomeratica (erosiva) basal del Ordoviciano en las proximidades del collado de la Barrosa. En él se pasa a una litología de grauvacas y pizarras aflorantes en algunos puntos del camino. L
Los terrenos que forman las crestas de las colinas son la serie de la Cuarcita Armoricana, en cuya base se intercalan los filones concordantes de cuarzo aurífero. Los filones de cuarzo aurífero más importantes han sido intensamente explotados, y corren con una direccion N -060, y buzamineto 50-60 NE concordante con la estratificación Ordoviciana.
La zona se encuentra atravesada por varios sistemas de fallas; siendo el más moderno y el que más interesa desde un punto de vista metalogenético, el de dirección E-O. A este sistema corresponde la falla más importante de la zona, cartografiable en el terreno a lo largo de 15 kilómetros: durante siete kilómetros sirve de encajamineto al rio Frio, entre Campillo de la Jara y el collado divisoria de las sierras de Nava y Sevilleja, prosiguiendo con dos ramales en Robledo del Mazo. A este sistema pertence tambien la falla de Sevilleja de la Jara, en la cual se encaja el rio Uso en su nacimiento y sobre la que se alinean las minas de plomo - plata de Pozancos. Las fallas afectan a todos los terrenos Hercínicos y ante-Hercínicos y por ende las rocas intrusivas.
La zona más mineralizada y de mayor potencia de filones está situada entre las minas Pilar y Capitán de la Sierra de Jaeña (ambas con galerías practicables), dando paso a diques de mucha menor importancia inmediatamente despues, en el O y el E.
En las etapas últimas de deformación Hercínica, encajan los filones en fracturas y fallas secundarias, así como en la zonas de debilidad de los estratos plegados, dando lugar a un pequeño campo de filones concordantes. El oro se concentra por las disoluciones sulfuradas, incluyendose en la pirita (sulfuros en general). Estos filones en el caso de mina Pilar encajan en los niveles del ordovícico basal conglomerático, y en los estratos suprayacentes de tipo más cuarcitoso e incluso pizarroso.
La final y definitiva etapa de concentración se debe a los procesos supergénicos: la liberación del oro nativo y el crecimiento en pepitas mucho mayores. Los sulfuros de hierro con oro reaccionan con las aguas superficiales dando lugar a sulfato de hierro, el oxido de hierro precipita y el oro permanece inalterado. La limonita presenta un pequeño grano de oro en el centro, o más cantidad procedente de varios antiguos cristales de sulfuro. El oro aparece donde el cuarzo esta teñido de oxido de hierro. No hemos reconocido indicios de cristales de pirita, pero si numerosos de arsenopirita, sindo hoquedades o fantasmas observandose perfectamente el hábito cristalino, que evidencian ese proceso secundario de lixiviación. Las labores romanas situadas entre la galería principal y la superficie delimitan notablemente el alcance de estos procesos supergénicos. Estos primeros explotadores se limitaban a las zonas de mayor riqueza y en especial de “oro perceptible a simple vista”
Basándonos en la clasificación de CASTROVIEJO (1998) la mineralización sería de tipo 14: Filones de Sb (AS)- Au y otros. Aunque las características del mismo lo definirían como sólo Au (As).
Existiría un segundo tipo de mineralización de tipo aluvionar, en el arroyo Ollegoso y el de la Brama, placeres auríferos. Las mineralizaciones de tipo aluvionar aparecen en la cartografía metalogenética sin ningún tipo de relación con las mineralizaciones filonianas
Historia de la minería de oro en la comarca
Los primeros en explotar el oro fueron los romanos, quienes según Calderon (1910) practicaron un socavón colosal para la extracción de la mena. No hemos podido localizar esa labor romana “colosal”. Donde sí aparecen vestigios de la actividad romana es en algunos de los filones de la mina Pilar, así lo cita en su trabajo Messeguer (1945):
“Los romanos, ávidos de riqueza y con elementos bastantes para adquirirla (...) realizaron en la actual mina “Pilar”, de la Sierra de Jaeña, la explotación de la parte superior de las vetas llamadas “La Rica”, Ingeniera” y “Eugenia” (las más potentes y de constitución menos dura, n.d.a.) acudiendo a pozos de arrastre emplazados en lo alto de la montaña y recorriendo los filones en el sentido del buzamiento hasta una profundidad de 70 a 80 metros”
Según URBINA y de acuerdo a DOMERGUE (1994). lo que sí es posible constatar es la ubicación del campamento romano, a pie de mina, en la cabecera del arroyo Ollegoso. En él quedan restos de molinos de mano y morteros mineros, tégulas, fragmentos de sigillata y escorias de hierro, aunque según URBINA no es posible asignar una cronología precisa al asentamiento. Este autor cita además:
“El campamento se encuentra al pie de un torrente o cause artificial de una docena de metros de ancho, que presenta pequeñas presas a sus dos lados a modo de cremallera, conformando para las aguas un recorrido en zig-zag.”
El autor desconoce su función, apuntando dos posibles utilidades, como lavadero de mineral o cauce de aguas torrenciales. La extensión del campamento es de 1 Ha aproximadamente. Existe otro importante hallazgo, relacionado con aras romanas, que ha servido para datar la presencia romana en la comarca, aparecen en cuatro nombres indígenas y uno de ciudadano romano de origen hispano. Según URBINA et. Al. (1994):
“1 km. Más abajo, donde el arroyo Ollegoso cruza la carretera, se encontraron 4 aras hace tiempo, lo que parece indicar la existencia de un cementerio en ese lugar (...) La cronología de estas aras corresponde al S I y IV d.C. De una parte parecen avalar el comienzo de la existencia del campamento en el S. I d.C con el que tienen necesariamente que estar relacionados, de una u otra forma. Por otro lado, confirmaría su existencia aún en el Siglo IV d.C.”
No se tienen nuevas citas de la explotación del precioso metal en la comarca hasta el siglo XVI, en que aparecen monedas acuñadas con oro procedente de la Nava de Ricomalillo (MESSEGUER, verificar cita). Dos documentos son importantes para el estudio de la minería en los siglos comprendidos entre el XVII y XVIII son el “Registro de minas de la Corona de Castilla” de Tomás Gonzalez (1832) y “Minas de oro y plata de España” de Lopez Cancelada (1831). Gracias Tomás Gonzalez se tiene la primera descripcion detallada (en 1688 y 1689) de las labores existentes en la Mina Oriental o Pilar de la Sierra de Jaeña, aunque no cita expresamente el lugar exacto, por el desarrollo que da a las mismas, sólo puede tratarse de la zona superior de la mina pilar, que más adelante se trabajaría como emboquille “Dos de Mayo”.
El primer documento se titula: “asiento ajustado con don juan de Pedrajas sobre poner en beneficio corriente una mina de oro en la Sierra llamada la Jadeña, término de la villa de Talavera de la Reina. 31 de diciembre de 1688. Cantadurías generales, num 852”
En el texto describe cómo la mina había sido beneficiada durante pocos días en 1686 estando en ese momento desamparada:
“(...) don juan de Pedrajas, habiendo tenido noticia de una mina de oro que está en la Sierra llamada la Jadeña, (...) junto á la alquería que llaman Buenas Bodas, pasó a verla y reconocer su situación y género de metales con ánimo de ponerle beneficio, y hallándose con el mismo ánimo y la disposición necesaria para ello, inquirió que por Cédula mía (el Rey, n.d.a.) de veinte y cuatro de mayo del año de mil y seiscientos y ochenta y seis habia concedido licencia á Juan Ramon de contreras para que la beneficiase, el cual pasó a trabajar en sus labores, y habiendo continuado pocos dias, se retiró y la desamparó totalmente, como lo está mas ha de dos años (...)”
Este testimonio hace pensar que ese tal Juan Remon intentaría explotar una mina ya existente, que debería tener cierta entidad, como se verá en las siguientes líneas del mismo texto:
“Que respecto de que dicha mina está trabajada de tiempo inmemorial, muy seguida y ahondada, y que son muy dilatados sus socabones (así en original n.d.a) y labores, y no se sabe cuánto, por dónde, y cómo será necesario seguirlos, ó si por disfrutarlos convendrá intentar labores nuevas en su contorno, y para poderlo hacer sin embarazo, oposito ni inconveniente de otra persona, se le ha de conceder por V.M. su Real Cédula de merced en forma de la dicha mina descubierta antigua, y de un cuarto de legua en su contorno de el sitio donde el suplicante fijare estaca con nombre y señalamiento de centro de el mineral (..)”.
Un segundo documento fechado en 18 de febrero de 1689 se titula así:
“ Cédula en que se hace merced á don Juan de Pedrajas en conformidad del asiento que por mandado de S.M. se ha tomado con él sobre el beneficio de una mina de oro en la sierra llamada la Jadeña, en término de la villa de Talavera de la Reina, con las facultades, preeminencias y calidades expresadas en este despacho.”
Una de las partes más interesantes de estos textos es la descripción de las labores antiguas y la forma de limitar la concesión, en 1689 vuelve a repetir ciertas nociones de la demarcación y trata el tema de la exención de impuestos. Se explica cómo por el mal estado de las labores, y del alejamiento a núcleos poblados y vías de comunicación, se requiere una fuerte inversión, y debe el explotador quedar exento de paga impuestos por un tiempo:
“Que respecto de los muchos gastos que precisamente necesita hacer el suplicante para poner en claridad y corriente el dicho mineral, sus pozos y socabones y labores, que son muchas y dilatadas, según se entiende, y que hoy están las más de ellas ciegas, (...) por todas razones, y mayormente por estar su situacion en una parage desierto, y sierra inculta, muy apartada de poblado, y que hasta tener aclaradas y corrientes las dichas minas y labores y estar en disposicion de proseguir sus frontones, vetas y guias no podrá tener fruto de ellas (...), se ha de servir V. M. de conceder al suplicante el que pueda trabajar, seguir y beneficiar las dichas minas libre de contribucion de quintos por el tiempo que fuere ...” (pags 650-651)
Encontramos una nueva cita en TOMAS GONZALEZ de concesión minera esta vez a un tal Antonio de las Peñas "en 8 de octubre de 1690" , y se refiere al mismo lugar de la Alquería de Buenasbodas. Del siglo posterior XVIII se tienen noticias por el trabajo de Lopez de Cancelada, citamos textualmente sus observaciones en la región de Sevilleja de la Jara, que entonces contaba bajo sus dominios la zona de Ricomalillo - Buenasbodas:
“En el término del lugar de Sevilleja, partido de Talavera, hay varias minas de Oro y plata, según el mismo señor Gallardo.- Una de Oro en tierra Jaena. Dió desde luego mucha riqueza a Federico Platamde, á don Juan Martinez de Perea, á don Juan Portalegra, y á su hijo don Francisco, pues todos estos las trabajaron unos en pos de otros, según reales cédulas de 1690, 1725, 1736 y 1737”.
No se dispone de datos referentes a la segunda mitad del siglo XVIII, pero según la labor recopilatoria de MESSEGUER (1945) los yacimientos estaban inactivos en la primera mitad del siglo XIX.
Entre los años 1853 y 1867 la sociedad La Fraternidad registra cinco concesiones y lleva a cabo una intenso laboreo, son de esos años la mayor parte de las construcciones y vestigios mineros reconocibles en el área. En el año 1860 se emboquillan las galerías Dos de Mayo y San Felipe, de 300 y 400 metros de longitud respectivamente, y que fueron cortando todos los filones productivos. Además se realizaron pozos de arrastre y galerías de dirección que permitieron la exploración y delimitación de la zona mineralizada principal.
La misma sociedad construyo una planta de tratamiento en una explanada situada entre ambas galerías, con molinos, cribas, horno de calcinación y tonel y piscinas de amalgamación; los restos de éstas construcciones son todavía reconocibles. Según Messeguer, en el año 1864 se trataron 25,82 toneladas de tierras y entre los años 1865 y 1867 se trataron 16,5 toneladas de cuarzo aurífero, siendo la ley muy variable, según análisis realizados en diferentes filones, la media oscilaba entre 15 y 58 gramos por tonelada aunque se extrajeron minerales con leyes de hasta 960 gramos por tonelada (Messeguer 1945). Tras el año 1867 se suspenden las labores, por problemas diversos de aprovisionamiento de agua en la planta, imperfecto tratamiento de amalgamación y porque algunos filones comenzaban a ser improductivos.
A partir de entonces la mina no volvió a ser explotada como tal, y se sucedieron campañas de exploración, que arrojaban estimaciones dispares sobre la ley de los filones y de las escombreras, las cuales aún almacenaban una gran riqueza. Se llevan a cabo campañas en los años 1897, 1912-1913, y 1927. Entre 1928 y hasta 1935 se llevaron a cabo nuevamente importantes labores de reconocimiento de la mineralizacíon y de la continuidad de la misma, restaurándose viejas labores, y emboquillandose una calicata y dos galerías en la mina Capitán (sobre esta mina desconocemos si existieron labores anteriores), en el extremo SE de la Sierra de Jaeña. Se consideraron los yacimientos interesantes y de porvenir, sin embargo las labores requerirían una importante inversión. Todo quedó parado en los años de la guerra civil.
La última labor de exploración de que se tiene noticia, y el trabajo más extenso publicado hasta la fecha fue realizado por Messeguer Pardo para el Instituto Geominero en 1945. El objetivo principal era evaluar la ley y la explotabilidad de la concesión Pilar y limitar la continuidad lateral de los filones y la mineralización en el resto de la Sierra de Jaeña. Para llevar a cabo el estudio se desescombraron y rehabilitaron parte de las labores, abandonadas desde hacía ochenta años. Se avanzaron las zonas más prometedoras, asi como los filones históricamente más ricos.
Según el propio autor los resultados fueron desalentadores, no superándose la ley de 4 g/t, muy por debajo de los 8 g/t que se estimaron como los de corte. Se realizó una primera cartografia geologica regional, y se estudio la posible continuidad lateral de los filones, tanto al Este (mina Capitán) como al Oeste, con un emboquille que cortó los filones muy empequeñecidos y empobrecidos. Se concluyó que la zona de mayor riqueza estaba centrada en la mina Pilar, en los emboquilles de dos de mayo y San Felipe. Las escombreras no ofrecían interés económico alguno. Fruto de aquella campaña son además, unas espectaculares muestras de oro nativo, de hasta 1cm que se exhiben en el Museo Geominero de Madrid.
Estado actual de la mina Pilar
En estos momentos sólo es accesible el llamado socavón Dos de Mayo. Se accede a la mina por una galería excavada en terrenos conglomeráticos pilocenos. Esta es la única parte peligrosa de la mina, debido a la dudosa resistencia del macizo rocoso. Sin embargo una vez recorridos una decenas de metros de llega a la roca resistente de la pizarras paleozoicas y últimos niveles del cambriano. Se prosigue bajo un pozo, enladrillado en perfecto estado de conservación.
Debido a que la mina era explotada mucho antes de llevarse a cabo el emboquille, y que el sostenimiento en los terrenos conglomeraticos era muy problematico, creemos que la entrada original a la mina pudiera ser a traves de este pocillo, el cual arma sobre terrenos mucho más competentes en el limite de las pizarras. También es posible que algún filón vaciado desde la superficie llegase a estos niveles y comunicase con el resto de la mina, actualmente muchos de los realces y filones se encuentran aterrados.
A partir del pozo la mina se hace segura, con las paredes y techos enperfecto estado, pudiendose recorrer toda ella sin más problemas.
Sólo algunos puntos son problemáticos como la traviesa de filón Moralidad (ver croquis), en la que se produce en corte de un nivel lleno de agua que ha provocado el colapso de algún bloque de techo sobre la galería y los vertiginosos pozos de arrastre de mas de 80 metros de profundidad.
La galería principal tiene una dirección N- 060 y va sucesivamente cortando los filones de cuarzo mineralizados. Los más pequeños, no eran explotados y otros son sólo pequeños emboquilles. Los grandes y trabajados son nueve: San Vicente, La Rica, Ingeniera, Justa, San Ildefonso, Moralidad, Secretaria, Catalina y Eugenia, hasta una distancia de 100 metros en que se deja de atravesar filones productivos. La galería avanza casi 200 metros girando al E hasta de nuevo cortar paralelamente a la formación un nuevo filón (creemos que estéril) prosigue por el algunos metros y termina. En la última parte de la galería se aprecian las huellas de los raíles de las vagonetas. Cabe destacar el buen estado general de las labores, especialmente en los filones más ricos que fueron saneadas en dos ocasiones en las campañas de exploración de 1928 y 1945.
Consideraciones finales
Entre los elementos patrimoniales de estas minas cabe destacar las ruinas de la Sociedad la Fraternidad, con hornos de calcinación y restos de las instalaciones de amalgamación, las ruinas casas de los mineros y de la mina. El socavón dos de mayo es de por si un vestigio minero de primera magnitud, constituyendo el sistema de galerías accesibles más grande de la zona Centro. Por otro lado las posibles labores romanas de la parte alta de los filones son únicas en los montes de Toledo y requieren una exploración sistemática pues se les atribuye ese origen y hasta la fecha no tenemos noticias de vestigios arqueológicos hallados en la propia mina.
A todo ello se une el interés como Patrimonio Geológico, pues estos filones auríferos son uno de los pocos puntos de la Península dónde es posible encontrar numerosas muestras de oro nativo reconocible de visu.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Calderón, S., (1910) Los Minerales de España. Junta para ampliación de estudios e Investigaciones científicas. Tomo I pp. 80-81
Gonzalez, T. (1832) Registro de minas de la Corona de Castilla
I.G.M.E. (1973) Mapa Metalogenético de España. E. 1:200.000. Hoja 52. Talavera de la Reina. Madrid
I.G.M.E. (1985) Mapa Geológico de España. E: 1:50 000. Hoja 682 Sevilleja de la Jara. Madrid
Messeguer Pardo (1945). Investigación de yacimientos de oro en La Nava de Ricomalillo (provincia de Toledo) Bol. Inst. Geol. y Min. Tomo LVIII 18º tercera serie
Sales Córdoba, F., (1982) Metalogenia del Oro de la Nava de Ricomalillo paginas 12- 13 Suplemento divulgativo Boletín Sociedad española de Mineralogía
Existen posibilidades de encontrar oro nativo por Cadiz, por la sierra, en sus riachuelo? Me gustaria practicar el bateo por ahi, en plan deportivo... y con detector si e permite.
ResponderEliminarEn el blog indicas "... también hay un pequeño pozo en las proximidades de las ruinas de la Fraternidad denominado “Pilar II”...
ResponderEliminarPero esto no es correcto, hay varios pozos en la mina Pilar entre el socavón Dos de Mayo y el socavón San Felipe, pero la mina Pilar II es una mina independiente de la mina Pilar, con una entrada de unos dos metros de altura y un túnel principal de varios metros (no sé exactamente la longitud, no se ve el final desde la entrada) que se encuentra en perfectas condiciones.